martes, 18 de noviembre de 2014

ALGUNA SOLUCIÓN

Hoy quisiera escribir y reflexionar sobre alguna de las cosas que han ido sucediendo en estos dos días que llevamos de la semana:
En primer lugar señalar que esta semana ha sido la primera vez que he salido al patio, puesto que los profesores van rotando todos los días, y hoy le tocaba a mi tutora encargarse de salir, y a mí me apetecía mucho ver cómo se comportan los chicos en el patio. He podido observar como hay chicos que les cuesta mucho relacionarse con sus compañeros, y están solos o esperando a que alguien se les acerque sin jugar ni hacer nada, simplemente allí sentados. Algunos de los niños que tienen alguna enfermedad o dificultad en el aprendizaje juegan solos, alguno de ellos intentando llamar la atención de los que le rodean, etc. Me ha gustado mucho la experiencia, porque es muy gratificante ver como se divierten los niños, pero a la vez, me ha sabido mal por esos niños que están solos, o se sienten solos.
Hoy también he podido asistir a uno de los problemas más complicados de solucionar, desde que estoy en el colegio. Un niño de mi clase ha golpeado a otro chico de la clase y le ha roto las gafas. Todo esto ha sucedido mientras entrabamos del patio, por lo que ni mi tutora ni yo hemos podido ver lo que realmente había ocurrido. La tutora ha intentado descubrir que había pasado preguntado en privado a los alumnos que ella considera que nunca mienten. Mi tutora le ha explicado lo sucedido a la jefa de estudios, y esta se ha encargado de comunicárselo a los padres de los implicados.
De todo esto saco la conclusión de que es muy difícil resolver temas tan complicados, y más aún sin haber visto lo que había sucedido realmente.
En cuanto a mis avances en clase, debo decir que sigo muy contenta. Todos los días la tutora me indica en alguna sesión que les quiere explicar a los chicos, o que quiere realizar en clase, y me deja que sea yo quien lo realice para que vaya cogiendo un poco de soltura. Lo único negativo que puedo señalar es que debido al poco tiempo de cada sesión, las profesoras se ciñen mucho al libro porque dicen que no da tiempo a nada más. Aunque yo le he propuesto a mi tutora, que puesto que estamos las dos, que yo me podría ocupar de preparar alguna actividad más  dinámica en la que los niños participen de manera más activa. Lo cual le ha parecido bien, y me dispongo a preparar algo para realizar mañana en la sesión de ciencias sociales.
Mañana os cuento que tal ha ido. ¡Hasta mañana!


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